Lo más importante de una cámara de seguridad, aparte de que disponga de una resolución suficiente para cumplir con su propósito, es que sea resistente, pues es probable que sea el objetivo de algún vándalo. Y la Samsung SVD-4300 promete serlo, gracias a sus chasis de aluminio y a la protección del objetivo con policarbonato de 3.5 milímetros, capaz de resistir martillazos.
Además, dispone de un zoom de 10x y es resistente al agua y al viento, pudiendo funcionar de día y de noche. Evidentemente, esta cámara tiene un uso más profesional, aunque puede ser útil si vivimos en algún chalet y queremos un poco de seguridad.Noticia sacada de: Xataka