BEAR es un robot, no un osito de peluche, y no ha sido creado para divertir a los niños sino para salvar vidas en el campo de batalla. Es un robot bípedo con un sistema de orugas capaz de transportar a los soldados heridos, recorriendo largas distancias.
Su diseño es óptimo ya que puede agacharse gracias a sus orugas, y recoger el cuerpo del soldado en brazos para llevarlo a un zona que esté fuera de peligro. De momento, el robot no ha recibido ninguna función quirúrgica pero en un futuro podría ser.
En efecto, el siguiente paso sería la creación de robots médicos, es decir robots que tengan capacidad para realizar pequeñas intervenciones en el campo como por ejemplo parar una hemorragia y dar algunos puntos de sutura.
Noticia sacada de: Ounae