Así, puede sostener una botella de cristal o un huevo sin hacer tortillas. Lo hace gracias a una serie de elásticos que actúan como si fueran músculos. Es decir que son muy resitentes y a la vez flexibles.
Podemos decir literalmente que DOMO siente los objetos que agarra en la mano, y que es capaz de ajustar su fuerza en función de su percepción de los objetos. Mirad el vídeo que viene a continuación, donde DOMO aparece en situación pasando una batería de pruebas…
Noticia sacada de: Ounae