El sistema integrará los modelos de Jaguar XK distribuidos a partir del año 2007, un sistema llamado PDBS (Pedestrian Deployable Bonnet System). El mecanismo es bastante sencillo ya que una vez que el sistema detecta el impacto, tan sólo necesitará 30 milisegundos para que los pistones accionen el capó.
En realidad se trata de dos mini cargas pirotécnicas situadas en la base del parabrisas, cargas que al reventar accionarán una serie de airbags que levantarán el capó para suavizar el golpe contra el coche, de tal modo que el aterrizaje de la victima no se tan brutal. Además, el diseño frontal del coche está pensado para infligir la menor cantidad posible de daños al peatón.
Noticia sacada de: OunaeMás información en: Popsci
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