Plante un sillón en su jardín

Nada de silicio, nada de chips, nada de plomo. Este sillón no se conecta a la red, no tiene luces y no funciona con baterías. De hecho, es probablemente el sillón menos tecnológico que puede encontrarse en el mercado. Se planta. Como lo oye. Se planta. En el jardín de casa. Diez días después de plantarlo estará listo. Podrá usted sentarse sobre su propio sillón de césped.

¿El último grito en muebles de jardín? Puede. Lo venden en Purves & Purves y es en realidad un armazón de cartón que tiene que rellenarse de tierra -250 litros- para que el césped crezca en su superficie. Viene con las semillas incluidas, sólo hay que dedicarle un poco de tiempo, regarlo y podar de vez en cuando. Piense bien dónde lo instala porque, como señalan sus creadores, no podrá moverlo una vez haya crecido. Le saldrá por un poco menos de 100 euros.

Noticia sacada de: Gadgetoblog


Un sillón para el jardín que se planta y crece.